" El fruto define el árbol y no lo contrario".
Aunque hayan sido grandes los errores de tu familia, si desarrollas la consciencia y logras que tu ego individual se pliegue antes tu ser transpersonal, todo tu árbol genealógico por muy dañino que fuera, se convierte en un organismo sagrado, digno de respeto.
Al cambiar tu, adquiere sentido la vida de tus antepasados, porque habiendo aparentemente caído en la trampa, produjeron un descendiente capaz de buscarse a si mismo con paciencia y perseverancia, hasta ascender del Yo al Nosotros.
Todo ser realizado se hace sanador de su entorno, y por ello convertido en el buen fruto, llega el mismo a ser el tesoro que tanto ha buscado.